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The Walt Disney Company - Historia

The Walt Disney Company S.A. (NYSE: DIS) (también conocida como Disney Enterprises Inc., simplemente Disney o Grupo Disney S.A.) es una de las compañías de medios de comunicación y entretenimiento más grandes del mundo.

Fundada el 16 de octubre de 1923 por Walt Disney y Roy Disney como un estudio de animación, al paso del tiempo se convertiría en uno de los estudios de Hollywood. Es operador y licenciatario de parques temáticos, y diversos canales de televisión abierta y por cable como ABC o ESPN. Las oficinas corporativas se encuentran concentradas principalmente en The Walt Disney Studios en Burbank, California. La compañía cotiza en la Bolsa de Valores de Nueva York desde el 6 de mayo de 1991.

WALTER ELIAS DISNEY

Walter Elias Disney —más conocido por su nombre artístico: Walt Disney— (Chicago, Illinois, 5 de diciembre de 1901 – Los Ángeles, California, 15 de diciembre de 1966), fue el fundador, junto con su hermano Roy O. Disney, de The Walt Disney Company.

Walt tuvo la infancia típica del hijo de un granjero, pues se crió en una granja en las cercanías de Marceline, Missouri. Más adelante, Walt diría que ésos fueron los años más felices de su vida; como tanto él como su hermana menor, Ruth, eran demasiado pequeños para ayudar en las labores de campo, pasaban la mayor parte del tiempo jugando. De esta época datan los primeros escarceos de Walt con el dibujo y su gran afición por los trenes.

Sin embargo, debido a una enfermedad, su padre se vio imposibilitado para continuar llevando la granja, y la familia se vio forzada a trasladarse a una casa de alquiler en Kansas City. Allí, tanto Walt como su hermano Roy tuvieron que ayudar a su padre a repartir periódicos, un trabajo duro que requería levantarse todos los días a las doce de la noche. A causa de ello, le costaba concentrarse en clase y con frecuencia se quedaba dormido. Era propenso a soñar despierto y a pasar el tiempo haciendo garabatos.

Más tarde, su padre se convirtió en uno de los propietarios de una empresa dedicada a elaborar bebidas carbonatadas radicada en Chicago, y la familia se trasladó a esta ciudad, donde Walt compaginó trabajar para su padre con sus estudios en la McKinley High School y en el Instituto de Arte. Fue el historietista del periódico del instituto, The Village Voice.

Cuando estalló la Primera Guerra Mundial, Walt dejó el instituto para luchar en el conflicto. Sin embargo, debido a su corta edad (16 años), fue ubicado en el cuerpo de ambulancias de la Cruz Roja y nunca llegó a entrar en combate. En 1919 solicitó ser relevado de sus obligaciones militares y fue enviado de regreso a Estados Unidos.

Decidido a seguir una carrera artística, se trasladó a Kansas City. Su hermano Roy trabajaba en un banco por la zona y, gracias a un amigo, le consiguió un trabajo en el Pesemen-Rubin Art Studio, donde Walt se dedicó a crear anuncios para periódicos, revistas y cines. Allí coincidió con otro dibujante, Ubbe Iwwerks, con el que trabó amistad, y ambos decidieron empezar su propio negocio.

Disney e Iwwerks (quien acortó su nombre a Ub Iwerks) fundaron una compañía llamada Iwerks-Disney Commercial Artists en enero de 1920, aunque no consiguieron demasiados clientes y finalmente tuvieron que abandonar. Ambos fueron contratados por la empresa Kansas City Film Ad, en la que trabajaron en anuncios, realizados con primitivas técnicas de animación, para los cines locales.

Disney estaba fascinado por las posibilidades de la animación. Pasó varios días en la biblioteca pública de Kansas City hojeando libros de anatomía y mecánica. Leyó también un libro de Edweard Muybridge acerca de la animación. Aprovechó su tiempo en Film Ad experimentando con animación y técnicas cinematográficas. Incluso cogió prestada una de las cámaras de la empresa para experimentar en casa.

Después de dos años en Film Ad, Disney creyó que había adquirido la experiencia suficiente como para emprender un nuevo negocio por su cuenta. En 1922, fundó la empresa Laugh-O-Gram Films, Inc., dedicada a realizar cortometrajes animados basados en cuentos de hadas populares y relatos para niños. Los cortos se hicieron famosos en la zona de Kansas City, pero sus gastos de producción excedían a los ingresos que proporcionaban.

Tras crear su último corto, la mezcla de acción real y animación Alice's Wonderland, el estudio se declaró en bancarrota en junio de 1923. Disney decidió entonces trasladarse al floreciente centro de la industria cinematográfica, Hollywood. Vendió su cámara y obtuvo el dinero suficiente para un viaje de ida en tren. Dejó atrás a sus amigos y antiguos empleados, pero se llevó con él la película de Alice's Wonderland.

Llegó a Los Ángeles con cuarenta dólares en el bolsillo y una película sin acabar en su maletín. Su propósito era abandonar el cine de animación, creyendo que no podría competir con los estudios de Nueva York. Pretendía convertirse en director de películas de acción real, y recorrió sin éxito todos los estudios buscando trabajo.

Al no encontrarlo, optó por volver a intentarlo con la animación. Su primer estudio en Hollywood fue un garaje en casa de su tío Robert. Envió la película Alice's Wonderland a la distribuidora neoyorquina Margaret Winkler, quien mostró un gran interés por la película y contrató a Disney para producir más películas combinando animación e imagen real.

Se reunió con su hermano Roy, que se estaba recuperando de una tuberculosis en un hospital de veteranos de Los Ángeles, y le convenció para que se encargase de la gestión económica del estudio. Roy estuvo de acuerdo. A petición de Disney, la actriz protagonista de Alice's Wonderland —Virginia Davis— y su familia se trasladaron a Hollywood desde Kansas City. Lo mismo hicieron Iwerks y la suya. Éste fue el comienzo del Disney Brothers' Studio, el germen de la futura The Walt Disney Company.

THE WALT DISNEY COMPANY

1923-1929
En 1923, dos meses antes de que Walt cumpliera sus veintidós años de edad, el estudio Disney Brothers' Studio (Walt Disney Studios a partir de 1925) comenzó a trabajar en una serie de cortometrajes denominados Comedias de Alicia, basados vagamente en la obra Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll.

Combinación de animación y acción real, esta producción mantuvo ocupado al estudio entre 1923 y 1927, estrenándose el cortometraje Alice's Day at Sea el 1 de marzo de 1924, siendo el primero de los cuarenta y uno que compondrían esta serie y Alice in the Big League, estrenado el 22 de agosto de 1927, el último; considerada agotada la fórmula, Disney optó por crear una nueva serie de cortometrajes sólo de animación: Oswald el conejo afortunado (Oswald the Lucky Rabbit). Sin embargo, Disney perdió los derechos del personaje frente a Universal, encargada de la distribución, por lo que decidió crear otro personaje nuevo muy similar a Oswald: el ratón Mickey.

El primer cortometraje en el que apareció Mickey, así como su novia Minnie Mouse y Clarabella, fue Plane Crazy, alcanzando un gran éxito con el estreno de Botero Willie, el primer cortometraje sonoro de dibujos animados en 1928.

En 1929, Disney comienza otra nueva serie de dibujos animados conocidas como Sinfonías tontas o Silly Symphonies con el estreno de La danza del Esqueleto (Danza macabra).

1930-1939
Durante esta década, aparecen varios de los personajes más representativos de Disney que interactúan con Mickey Mouse: en 1930, hace aparición Pluto en el cortometraje The Chain Gang; Goofy debutaría en Mickey's Revue (1932), el mismo año del estreno de la primera película a color de Disney: Árboles y flores; el Pato Donald lo haría en La pequeña gallinita sabia (1934).

Al mismo tiempo, Disney produce una serie de cortometrajes inspirados en cuentos de hadas como Los tres cerditos, El flautista de Hamelín, La liebre y la tortuga, Caperucita roja, La cigarra y la hormiga, El toque de oro, El sastrecillo valiente o El patito feo, ganando premios Oscar con varios de ellos.

Sin embargo, el mayor hito de Disney en esta década se produce con el estreno en 1937 de su primer largometraje animado, Blancanieves y los siete enanitos, el primero de los numerosos éxitos que obtendría Disney con las adaptaciones de cuentos clásicos a largometrajes de animación para la gran pantalla.

1940-1949
Los siguientes grandes largometrajes animados de Disney, Pinocho, Dumbo y Bambi, se estrenaron en 1940 —año en el que los Estudios Disney se trasladan con carácter definitivo a Burbank (California)—, 1941 y 1942 respectivamente.

Sin embargo, a pesar de continuar el camino del éxito con estas tres nuevas películas de animación, la entrada de EEUU en la Segunda Guerra Mundial en 1941 supuso una grave recesión que casi obliga a los estudios Disney a cerrar sus puertas.

Por esta causa, en los años que duró el conflicto y los inmediatamente posteriores, Disney no pudo lanzar nuevas grandes producciones y se centró en producir principalmente cortometrajes y material propagandístico y moral para el gobierno con películas como Victoria por medio de la fuerza aérea o El rostro del Fuhrer. Aun así, lo que realmente evitó la quiebra fue la reedición de Blancanieves y los siete enanitos, que nuevamente generó un importante beneficio.

No obstante, durante este complicado período se dieron innovaciones técnicas, como la combinación de animación con actores reales en películas como El dragón chiflado, Canción del sur o Dentro de mi corazón; y también, con el estreno de Seal Island, se inició una nueva línea de Disney con la producción de documentales.

1950-1959
1950 fue un año importante para Disney; supuso el inicio de la producción de películas de larga duración exclusivamente con actores reales (La isla del tesoro) y el regreso a los largometrajes animados con el estreno de La Cenicienta.

De este modo, La Cenicienta inaugura una década de recuperación en la que brillan grandes producciones animadas como Alicia en el país de las maravillas (1951), Peter Pan (1953), La dama y el vagabundo (1955) y La bella durmiente (1959).

Disney amplía también sus horizontes de entretenimiento con la inauguración del primer parque Disneyland el 18 de julio de 1955 en Anaheim, California.

1960-1969
En los primeros años sesenta, Walt Disney Productions se consolidó como la más importante empresa dedicada al entretenimiento familiar del mundo.

Tras décadas de intentarlo, Disney consiguió finalmente los derechos de los libros de P.L. Travers sobre una institutriz con poderes mágicos, y en 1964 se estrenó la película Mary Poppins, que combinaba animación y acción real, y fue otro de los grandes éxitos de la factoría Disney. Es, además, con cinco Oscar una de las películas más premiadas en la historia de los estudios.

Dos años más tarde y poco después de la aparición de la primera película de Winnie the Pooh, Walt Disney falleció el 15 de diciembre de 1966. Tenía 65 años. Tras de sí quedó un imperio creado por un humilde hijo de granjero a base de imaginación, perseverancia, pasión y dedicación.

1970-1979
Los años 70 destacan por ser la década con la más baja producción de largometrajes de animación en la historia de Disney, cuatro en diez años. A diferencia de las etapas anteriores, fueron escasas las películas que consiguieron gran repercusión, siendo algunas de las pocas destacadas La bruja novata (1971) —año en el que Walt Disney World Resort abre sus puertas para el público en Orlando (Florida)— o Robin Hood (1973).

Durante este periodo se primó más la realización de películas combinación de acción real y animación y, principalmente, sólo de acción real.

1980-1989
La falta de éxitos visibles durante la década anterior continuó durante los años ochenta, lo que provocó que los estudios Disney tuvieran que afrontar una de sus mayores crisis desde la Segunda Guerra Mundial.

Aun con la creación en 1983 del canal de televisión Disney Channel y la inauguración de nuevos parques temáticos como Tokyo Disneyland (Japón), el imperio Disney se tambaleó y a punto estuvo de caer de no ser, como había sucedido ya antes con Blancanieves, por el éxito cosechado con un nuevo largometraje de animación basado en un cuento de hadas: La sirenita (1989). Con esta película se inició una nueva etapa dorada conocida como «el renacimiento de Disney», caracterizada por el regreso a las adaptaciones de cuentos clásicos y grandes apuestas en el cine de animación.

1990-1999
Los años 90 supusieron un florecimiento de la esencia con la que Disney había alcanzado mayor reconocimiento a lo largo del tiempo: el cine de animación y, especialmente, las adaptaciones de grandes clásicos de la literatura infantil y juvenil.

Fueron muchos y exitosos los largometrajes animados que se lanzaron durante esta década, más que en ninguna otra antes: La Bella y la Bestia (1991), Aladdín (1992), El rey león (1994), Pocahontas (1995), Toy Story (1995), El jorobado de Notre Dame (1996), Hércules (1997), Mulán (1998), Tarzán (1999), entre otras películas y abundantes secuelas.

Este cambio de rumbo frente a las dos décadas precedentes, no sólo supuso una recuperación económica y de prestigio, sino también un margen de beneficios muy amplio. A partir de entonces, será frecuente que Disney apueste por varias grandes producciones de animación al año.

2000-2009
La tendencia iniciada en la década final del siglo XX es continuada a principios del XXI con estrenos de grandes largometrajes de animación anualmente y con excelentes resultados, especialmente los realizados por Disney Pixar; las siguientes películas se situaron entre las diez más taquilleras en su año correspondiente: Dinosaurio (2000), Monstruos S.A. (2001), Buscando a Nemo (2003), Los Increíbles (2004), Cars (2006), Ratatouille (2007), Wall·E (2008) y Up (2009).

Idéntico éxito tuvieron películas de no animación como Piratas del Caribe: La maldición de la Perla Negra (2003), La búsqueda (2004), Las Crónicas de Narnia: El león, la bruja y el armario (2005), Piratas del Caribe: el cofre del hombre muerto (2006), Piratas del Caribe: en el fin del mundo (2007), La Búsqueda 2: El Diario Secreto (2007) y Las crónicas de Narnia: El príncipe Caspian (2008).

En 2009, con el estreno de Tiana y el sapo, Disney crea la primera de las Princesas Disney de raza afroamericana. Ese mismo año, Marvel Entertainment LLC fue adquirida por Disney, convirtiéndose en una nueva filial Disney: Disney Marvel.

2010-2019
La década de 2010 está marcada por la adquisición de grandes franquicias como Star Wars o Los Vengadores; estudios como Fox o Blue Sky Studios; el lanzamiento de la plataforma Disney+, además de la realización de películas de acción real inspiradas en los clásicos animados de Disney o de la literatura infantil y juvenil: Alicia en el País de las Maravillas (2010), Oz, un mundo de fantasía (2013), Maléfica (2014), Cenicienta (2015), El libro de la selva (2016), Alicia a través del espejo (2016), Mi amigo el gigante (2016), Peter y el dragón (2016), La bella y la bestia (2017), El cascanueces y los cuatro reinos (2018), El regreso de Mary Poppins (2018), Dumbo (2019), Aladdin (2019) y El rey león (2019).

En el cine de animación, los estudios Disney logran por primera vez que una de sus películas gane el Óscar a la mejor película de animación con Frozen: El reino del hielo (2013), consiguiéndolo también en años siguientes con Big Hero 6 (2014) y Zootrópolis (2016). Su filial Pixar, por su parte, fue premiada por Toy Story 3 (2010), Brave: Indomable (2012), Del revés (2015) y Coco (2017). Entre ambos, se hace patente nuevamente en esta década la hegemonía de la compañia Disney en el cine de animación.
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